SANDRA SARRAUA

Nací en C.A.B.A., aunque desde muy niña vivo en La Plata, solamente interrumpido por un año, que viví en Belloq, Carlos Casares. Entre este y Bolívar pasé todas las vacaciones de mi infancia.

Estudié en La Plata, mi trabajo es diseño y tareas administrativas en una gráfica, empresa familiar. Tengo dos hijos.
Pinto desde los 12 años, cuando comencé el Bachillerato de Bellas Artes, muchos años después, empiezo a tomar clases con Fernanda Piamonti, luego Alejandro Argüelles, mis queridos maestros.

Sandra Sarraúa tiene sus raíces familiares en Bolívar, uno de los tantos distritos que forman parte de la cuenca deprimida del Río Salado, en la Provincia de Buenos Aires. Zona de cañadones y lagunas, de fríos intensos y de pastos blanqueados por la helada.

Este paisaje se constituye en la matriz de la que surge su obra.

El grafito y la tinta con la exploración consecuente de los materiales en la mano de Sandra, han danzado sobre la tela reflejando un paisaje que ha formado parte de su infancia.  

 “Ella nos confronta con la belleza escondida en nuestros paisajes cotidianos, esos escenarios naturales por donde vagan nuestros recuerdos. Los trazos perfectos de llanos interminables, la simpleza de una huella en el barro, o la desazón del agua estancada, que espera escabullirse entre las grietas.

En lo nuestro encontró su idioma. En los detalles halló sus palabras. La obra, es la introspección perfecta de su persona, capaz de brindarle grandeza a un charquito entre los yuyos, acompañar al viento azotando pastizales, o ser la furia descontrolada de los torrentes de agua.

Resalta cada fragmento. Le da valor absoluto a lo que el resto no ve.

Sandra Sarraúa. Platense con raíces enclavadas en Bolívar, origen de su familia y sus veranos de infancia. Imprime en su obra, nuestra identidad de pueblo agreste.”

Marisa Mazzucchelli

Obra